CRM



Customer Relationship Management (CRM)

CRM significa Customer Relationship Management (Gestión de Relación con el Cliente) y se refiere a una estrategia y una herramienta que permite acceder a la información y datos de los clientes, así como gestionar las interacciones con ellos a través de diferentes canales de comunicación¹³. Su objetivo es mejorar la fidelización y la satisfacción de los clientes, así como aumentar las ventas y el beneficio.



Entre las ventajas de un CRM se encuentran:


- Relaciones más personales con los clientes actuales y potenciales.

- Personalización de los servicios y las ofertas según las necesidades y preferencias de los clientes.

- Automatización de los procesos de venta y atención al cliente.

- Gestión de los datos e informes de forma centralizada y segura.

- Integralidad en la gestión de las áreas de marketing, ventas y servicio al cliente.

- Mayor control y seguimiento del rendimiento de las campañas y los equipos comerciales.

- Aceleramiento del ciclo de ventas y el flujo de caja.

- Mayor competitividad y diferenciación frente a la competencia.

- Internacionalización y adaptación a diferentes mercados y segmentos.

- Integración con otras plataformas o aplicaciones.

- Información de la empresa en tiempo real.

- La plataforma se ajusta a la empresa.

- Reducción de costes operativos.

- Mejor calidad de los análisis y los pronósticos.

- Mejora la toma de decisiones estratégicas.


Los beneficios de un CRM en una empresa se pueden apreciar en diferentes aspectos, como:


- Reconocimiento de clientes: al conocer mejor a los clientes, se puede ofrecer una atención más personalizada y eficaz, lo que genera confianza y lealtad.

- Fortalecimiento y notoriedad: al brindar una experiencia positiva al cliente, se puede mejorar la reputación e imagen de la empresa, así como generar recomendaciones y referencias.

- Poder de competencia en el mercado: al contar con una herramienta que optimiza los procesos y facilita la innovación, se puede ganar ventaja competitiva frente a otras empresas del sector.

- Crecimiento de las ventas: al identificar oportunidades, segmentar mejor, automatizar tareas y acortar el ciclo de ventas, se puede incrementar el volumen y el valor de las ventas, así como el margen de beneficio.

- Lealtad del cliente: al fidelizar a los clientes con un servicio de calidad, se puede aumentar la retención, la recurrencia y el valor del tiempo de vida del cliente (LTV).


Existen diferentes tipos de software CRM que se pueden utilizar según las necesidades y el presupuesto de cada empresa. Algunos ejemplos son:


- De pago: son aquellos que requieren una licencia o una suscripción para su uso. Suelen ofrecer más funcionalidades, soporte técnico y personalización. Algunos ejemplos son Salesforce, HubSpot o Zendesk.

- De código libre: son aquellos que se pueden descargar y modificar libremente sin pagar por su uso. Suelen ofrecer menos funcionalidades, soporte técnico y personalización. Algunos ejemplos son SuiteCRM, Zoho CRM o CiviCRM.


La aplicación de un CRM en una empresa implica seguir una serie de pasos para implementar la estrategia y la herramienta adecuadas. Algunos pasos son:


- Definir los objetivos, las necesidades, el alcance, el presupuesto y el cronograma del proyecto CRM.

- Elegir el software CRM más adecuado para la empresa según sus características, funcionalidades, precio y compatibilidad con otros sistemas existentes.

- Instalar, configurar y personalizar el software CRM según los requisitos definidos previamente. También implica realizar pruebas, formar a los usuarios y migrar los datos desde los sistemas anteriores al nuevo sistema CRM.

- Evaluar los resultados obtenidos con el nuevo sistema CRM, resolver los posibles problemas o incidencias que surjan, realizar el mantenimiento y la actualización del software y proponer mejoras continuas.


Las formas de concebir al CRM pueden variar según el enfoque que se le dé a la gestión de la relación con el cliente. Algunas formas son:


- CRM operativo: se centra en automatizar y optimizar los procesos operativos de marketing, ventas y servicio al cliente, así como en facilitar la comunicación con los clientes a través de diferentes canales.

- CRM analítico: se centra en recopilar, almacenar y analizar los datos e informes de los clientes, así como en generar conocimientos e insights que ayuden a mejorar las estrategias y las decisiones.

- CRM colaborativo: se centra en integrar y compartir la información y los recursos entre los diferentes departamentos y actores involucrados en la relación con el cliente, tanto internos como externos.

- CRM social: se centra en aprovechar las redes sociales y las comunidades online como medios para interactuar con los clientes, escuchar sus opiniones, generar engagement y fomentar la reputación.